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La actividad que se puede ver en el
vídeo se ha desarrollado como una tarea de investigación. Como un
rompecabezas que hay que montar basándose en unas normas básicas.
Una vez que algún grupo descubre
(por razonamiento propio o con la ayuda del profesor/a) que además
de los enlaces sencillos se pueden establecer enlaces dobles, y
hasta triples, entre los átomos (lo cual constituye toda una
novedad) las estructuras moleculares se resuelven con una
facilidad pasmosa. Es un ejemplo palpable de cómo una buena idea
puede hacer avanzar el conocimiento muy rápidamente.
Como es lógico no se consideran los
efectos que sobre la estructura molecular pueden tener los pares
no enlazantes. De ahí que la molécula de agua aparezca con una
configuración lineal o la de amoniaco con estructura triangular.
Esta actividad llena de contenido
la tarea que aguarda a continuación:
empezar a formular. Los números de oxidación positivos y negativos ya
tienen sentido. Indican el número de electrones que se comparten.
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