El sonido es una onda de presión que viaja en el aire con
una velocidad aproximada de 340 m/s.
Si se produce un sonido en el interior de un tubo se
generará una onda estacionaria si se cumplen las llamadas condiciones
de contorno para los extremos de la onda: que exista un nodo en el
extremo del tubo si éste está cerrado o un vientre si está abierto.
Esta circunstancia permite diseñar un experimento en el
cual se utilizan las ondas sonoras estacionarias que se pueden formar en
un tubo para determinar la velocidad de propagación del sonido en el aire. |